Tropicanita - Kleines Tropicana

Cuba 1997; director: Daniel Díaz-Torres, guión: Eduardo del Lano, con Peter Lohmeyer, Vladimir Cruz, Carlos Cruz, Enrique Molina, 112 min., v.o. con subtitulos en alemán

La Habana. En una noche del verano tropical se halla el cadáver de un turista alemán en el patio de una casa grande, con unas alas grandes, atadas a su espalda y con una botella de ron en la mano. Para la policía local el caso está resuelto rápidamente: un extranjero borracho salta del techo durante una fiesta acalorada. Pero "el caso del alemán volante" persigue al joven oficial Lorenzo (Vladimir Cruz actuando como una mezcla algo entre Hemingway y Colombo). ¿Qué era lo que el difunto, con nombre de Hermann Pangloss, había buscado en Cuba? Y sobre todo: ¿qué tenía su padre que ver con esto, quien durante los años 40 era dueño de un bar titulado "Tropicanita"?
Lorenzo entrevista a todos con quienes Hermann Pangloss había estado en contacto en Cuba: Dora, la frustrada operadora del elevador y Hellseherin; la bellísima secretaria Silvia, que en realidad es psicóloga; el misterioso comerciante de antigüedades Nicanor y su mujer excéntrica Chrissy. La investigación siempre da nuevos virajes inesperadas, hasta que un día Lorenzo le presenta a su jefe una solución, que es tan sorprendente que a lo mejor no se la comentamos aquí.
"Uno no para de estar asombrado de los acontecimientos y personajes bizarros", así comentaron los visitantes de la Muestra del Cine en Munich en 1998 esta primera coproducción cubano-alemana, "...te mueres de la risa".